Se percibía en la atmósfera esa enemistad manifiesta, que también sonaba a un plan prediseñado, a una estrategia de marketing para sacudir la modorra de esa eterna convivencia televisada. Finalmente, la producción de Gran Hermano disfrutó de una pelea entre Furia y Coti Romero.
La doble de riesgo avisó desde el preciso instante que la correntina pisó la casa que le haría la vida imposible, que consideraba injusta su entrada por la fama que posee en el exterior, lo que presupone como una ventaja en las votaciones. En un día convulsionado por su salida del aislamiento para realizarse unos análisis clínicos, Juliana Scaglione increpó con todo a Constanza.
La más polémica de esta edición la incitó, la buscó y encontró la reacción de Romero, que se hartó de sus palabras hirientes y se le plantó cara a cara, en una situación que estuvo al borde de los golpes, de los agarrones y que no llegó a mayores consecuencias de milagro.
FURIA Y COTI ROMERO CASI SE AGARRAN A LAS PIÑAS
Todo comenzó en una charla grupal, en la que analizaron las compras y la exigencia a los fumadores para que aminoren el gasto en ese hábito. Ahí, Furia le tiró una indirecta picante a Romero: “Siempre agarran algo de punto para que suene picante, porque vienen al pedo. Agarras cualquier cosa pequeña para estallar, pero fue un comentario para reírnos. Como en tu Gran Hermano todo lo daban vuelta, agrandan, eso ya pasó acá”.
La correntina saltó inmediatamente: “¿Qué significa eso? ¿Que te tengo envidia?”. Así se detonó el botón de un intercambio furioso. “Envidia le tenes a este Gran Hermano porque es mejor que el tuyo, no a mi sola”, exclamó Juliana, que luego agregó en tono desafiante: “El mejor GH papá, todos ustedes quieren volver a entrar acá y te tocó a vos. Ya vinieron un montón. Traigan gente que sepa jugar”.
Constanza la toreó: “¿Te da miedo que tenga seguidores? Entonces tranquila, estás todo el tiempo hablando de eso”. Scaglione redobló la apuesta: “Para nada, estoy re tranquila, pero es injusto. Tenés que ir a GH Famosos”. Y después le tiró una desagradable frase: “Pasala bomba, trae buena energía, no estés todo el tiempo durmiendo”.
“¡Deja de dormir! Anda a cazar cocodrilos”, ironizó de manera despectiva Furia por su condición de correntina. A lo que Coti le devolvió: “Anda a cog.. vos”. Así todo derivó en una soez charla. “Obvio, tengo sexo y juego. Ya lo hiciste. No veo nada, quiero ver más”. Frente a ese trato de mala jugadora, Romero respondió: “Yo no estoy gritando todo el tiempo como vos”.
Así se pudrió todo con la invitación de Juliana: "¿Querés escucharme gritar? ¿Alguien te gritó?". Eso desató en Coti la reacción de pararse e ir a buscarla, para quedarse las dos cara a cara. Romero le bramó: "Dale, decime, gritame, a ver…". Tras unos segundos de tensión, que parecía que terminaría en violencia física, la doble de riesgo exclamó: "No te voy a gritar, te voy a besar. A eso viniste, a besarme. Otra que gusta de mi ahora".