En un momento íntimo y de mano a mano con Luis Novaresio, como una de las invitadas a Debo decir, Viviana Canosa se encontraba sentada en un espacio de luz tenue dentro del estudio de América cuando en una especie de ping pong fue respondiendo y contando algunas facetas, hasta ahora desconocidas, de su vida personal.
Es ese confesionario, la conductora de A24 se animó a exponer algunos secretos en cuanto a su intimidad y sorprendió cuando le detalló al periodista un momento en el que sufrió de acoso. Además, reveló que es lo que tiene en su mesa de luz que la llevó a reflexionar o cambiar su forma de ser. “Tengo la Biblia”, confesó la polémica animadora.
Mirando a cámara, y en medio del silencio del estudio, Viviana, que bien sabe de los tiempos televisivos, generó un clima propicio para el confesionario y explicó en cuanto al libro religioso, “cada tanto, o te diría casi a diario, la abro en cualquier parte y leo un Salmo”.
"En la mesa de luz tengo la Biblia y cada tanto, o te diría casi a diario, la abro en cualquier parte y leo un Salmo”, confesó la periodista de A24.
“A veces no lo entiendo bien, pero durante el día, eso que leí se conecta con otras cosas”, cerró ese punto Canosa. A lo que Novaresio, aprovechó el silencio de la comunicadora para consultarle al respecto en cuanto a si estaba segura de que Dios existe.
Por su parte, Viviana no dudo en su respuesta y con firmeza lanzó: “sí. De pocas cosas estoy tan segura en la vida. Dios existe”. Sin dudas, una faceta que pocos han de conocer sobre ella y que habla de una mujer que va más allá de sus polémicas editoriales y personalidad confrontadora y combativa.
"Lo descubrí haciendo terapia. Un día recordé cómo una ex pareja me había agarrado del cuello cuando le dije, nos separamos", detalló Canosa.
Pero otro punto, y no menos importante en su descargo, tiene que ver con haber reconocido que fue víctima de acoso y violencia de género. “Yo decía que no, pero lo descubrí haciendo terapia. Un día recordé, porque me lo había olvidado, de cómo una ex pareja me había agarrado del cuello cuando le dije, nos separamos”, revivió Canosa.
Y concluyó, “el tema del acoso también me lo había olvidado. Me sucedió en los comienzos de mi trabajo, de ir recomendada a un lugar por el hermano de la persona que me iba a dar trabajo. Me escapé. Y después tuve un episodio en casa de Gobierno que fue desagradable y que no quiero recordar porque esa persona ya falleció”.