El joven actor regresó al país luego de pasar gran parte de la pandemia en España mientras apostaba a una carrera como jugador de fútbol y aguardaba por la ciudadanía. Sin embargo, cansado de esperar por trámites y papeles, volvió a Argentina para continuar con su faceta artística.
Separado de Julieta García, la modelo rosarina que supo acompañarlo durante los últimos cuatro años, Stéfano de Gregorio adelantó que tiene proyectos para trabajar en calle Corrientes, otro para actuar en México, que está estudiando neutro y, en diálogo con Radio Ensamble, recordó el peor momento de su vida.
Según el actor, que desde muy temprana edad supo ser parte de programas como Chiquititas, Floricienta y Rincón de Luz, hace unos años le tocó afrontar una difícil situación luego de caerse un proyecto que iba a realizar junto a la productora Cris Morena, la mujer que lo descubrió y le dio un lugar en el medio.
“Un momento tremendo fue en el 2010 cuando venía ahorrando, en un sistema de familia de ahorrar para poder comprar la casa de mis papás, y era como mi primer sueño de chico. Cuando llega justo el momento de que casi teníamos toda la plata para comprar la casa Cris me contrata por 5 años más, hasta el 2016”, comenzó Stéfano.
Revelando un dato hasta ahora desconocido, el actor siguió: “en ese momento me dijo que iba a trabajar todos esos años y que iba a ganar todos esos montos. Entonces firmo y ya me quedo tranquilo y pido una hipoteca de 50 mil dólares para comprar la casa”.
"Firmé contrato por 5 años con Cris, pedí hipoteca y le compré una casa a mis papás. Muere Romina Yan, se cancela todo y tuve que salir a pagar la hipoteca", recordó el actor.
“La pido tranquilo porque sabía que tenía contrato por 5 años más y con lo que iba a ganar la podía pagar. Y, a los días que pido la hipoteca me dan la plata, compro la casa, firmo y estaba en el momento de más felicidad en mi vida cuando pasa una tragedia enorme que es que muere Romina Yan de la noche a la mañana”, continuó Yeyito.
Fue entonces que el actor tuvo que tomar una importante decisión en su vida. Agradecido y memorioso de la mujer que le abrió las puertas del medio De Gregorio confesó: “Me llamó la mano derecha de Cris para decirme que ella no iba a seguir, que no iba a hacer nada por que estaba devastada y que yo tenía dos caminos a seguir: Hacer juicio o romper los contratos y no hacer nada”.
“La verdad que después de todos los años que había trabajado con Cris Morena y todo lo que me había dado, lo primero que hice fue romper el contrato y decirle que no pasa nada. La cuestión es que yo tenía que levantar 50 mil dólares, sin trabajo de un día para el otro”, recordó Stéfano.
Finalmente, pudo encontrar una salida y concluyó: “Me puse a laburar con presencias, en cumples de 15, en eventos, en conducción, hice de todo. No sabía ni lo que era una hipoteca y cuanto más tardaba más aumentaba el precio. Me tenía que romper para saldar esa cuenta”.
