Antonella Carla Menem Pinetta se pasó la vida luchando. Primero para ser reconocida como hija de Carlos Menem Junior, el hijo de Carlos Menem fallecido trágicamente cuando su papá era presidente de la Nación en un hecho presentado como "accidente de helicóptero" pero con fuertes sospechas de que se trató de un atentado.
Después, para tener relación con la familia del ex mandatario, tarea de la que finalmente desistió: según lo que le contó a Paparazzi, ya no le interesa tener contacto ni con su abuela Zulema Menem ni con su tía Zulemita, con quienes mantiene un interminable conflicto mediático, social y judicial.
Antonella dialogó con Paparazzi a la salida de una ceremonia religiosa que se llevó adelante al cumplirse dos años del fallecimiento del líder del clan, Carlos Saúl Menem, quien gobernó la Argentina durante dos períodos consecutivos (1989-1999) dejando una huella imborrable.
Para algunos fue un estadista que dominó a la inflación, estableció la convertibilidad y dotó al país de avances tecnológicos nunca vistos, y para muchos otros traicionó los ideales peronistas, desguazó al estado, regaló las riquezas naturales y provocó que, mientras un sector privilegiado disfrutaba de la buena vida, por otra parte quedara un tendal infernal de pobres y desocupados.
Afuera del recinto, Antonella se quejó de una extraña circunstancia que sucedió adentro. Según ella, "Yo estaba ubicada con mi hijo en la primera fila cuando se acercó un policía y me dijo que no podíamos quedarnos en ese lugar porque estaba reservado para Duhalde".
"Yo le dije que no, que de ninguna manera nos íbamos a ir porque nosotros somos parte directa de la familia y tenemos los mismos derechos que los demás, y que uno de esos derechos era estar ahí, un periodista le dijo que me tenían que dejar estar, y ahí se solucionó", siguió.
Sin perder la calma, quizás aferrada a aquello de que lo cortés no quita lo valiente, Antonella fue contundente al manifestar que ya no busca acercarse a Zulemita ni a Zulema, quienes nunca miraron con buenos ojos su presencia en los medios reclamando su identidad. "Con mi abuela y con mi tía no tengo relación en absoluto. Para nada. Ya para mi no son parte de mi familia, ya desde hace muchísimos años".
"No me interesa tener nada que ver porque estuve 25 años rogándoles cariño y ellas nunca quisieron entender que yo siempre quise eso, sino que pensaron que era por la parte económica y nada que ver. Es muy doloroso porque se perdieron el crecimiento mío, el de mis hijos. Es un dolor muy grande porque mis hijos no pudieron concoer a su bisabuelo. Nunca supieron separar los tantos porque si tienen un problema conmigo, mis hijos no tienen que estar sufriendo de la misma manera como sufrí yo. Mi hijo tuvo que conocer a su bisabuelo en un cajón como me pasó a mi", agregó.
Sin embargo, Antonella conserva la esperanza de que la situación se revierta con "la nueva generación de los Menem", es decir con sus hijos y los de Zulemita. "No intenté saludarlos, no me animo porque no quiero generar un conflicto más de todos los que ya hay".
"Pero me encantaría tener un trato con Luca y con Maleh ya que son mis primos. Lamentablemente me perdí una parte de su crecimiento, pero bueno... Dios todo lo ve y creo que el día de mañana pueda tener contacto con ella y separemos los tantos porque el problema de los adultos no tienen por qué sufrirlo los niños", cerró.
IMAGENES Y NOTA: CARLOS GONZÁLEZ